La ceremonia del bautismo es profundamente simbólica y llena de significado. ¿Qué es el bautismo? y ¿qué nos enseña la Biblia acerca de este aspecto del proceso de conversión? ¿Qué tipos de Bautismos encontramos en algunas religiones o grupos?

1-01-2010

Siendo que la mayoría de los creyentes en el Mesías de hoy día provienen del llamado cristianismo nominal tradicional, es una realidad que muchos retienen los conceptos del llamado "bautismo". Pero, ¿de donde viene dicho concepto?... 

"Bautismo" proviene de una palabra griega (bá·pti·sma) que se refiere al proceso de inmersión, es decir, sumergirse y emerger; se deriva del verbo bá·pto, “sumergir”. (Jn 13:26.)

En la Biblia, “bautismo” e “inmersión” son términos sinónimos, como se muestra en la versión El Nuevo Testamento Original (traducción de H. J. Schonfield), en la que se vierte Romanos 6:3, 4 de la siguiente manera:

“¿Podéis ignorar que quienes nos hemos vinculado a Mesías por la inmersión hemos quedado así asociados con su muerte? Mediante esta vinculación con él por la inmersión nos hemos sepultado juntamente con él”. 

Según la Biblia, el bautismo es una ceremonia en la cual una persona es sumergida en agua como símbolo del perdón de sus pecados y recibe la rúaj santa o espíritu santo por medio de la imposición de manos (ver siguiente tema). Cuando el espíritu divino mora en su interior, la persona llega a ser conversa al Mesías. Y, si permanece fiel a lo largo de su vida, llegará a ser un hijo inmortal del Elohím  cuando el Mesías regrese a la tierra.

La inmersión de Yojanán tenía que ser sustituida por la que Yehoshúa había mandado: 

Mat 28:19: Por lo tanto, vayan a hacer talmidim a gente de todas las naciones, dándoles la inmersión en mi Nombre.”. 

Ese fue el único bautismo en agua que contó con la aprobación de YHVH a partir del Pentecostés como ya hemos visto. 

    Por supuesto que esta Inmersión requeriría un previo arrepentimiento sincero y un volverse además de una dedicación plena en oración personal para efectuar la voluntad divina. Por tanto, se requería entender la Palabra de Yehovah y tomar una decisión consciente de presentarse publicamente para hacer Su voluntad revelada, como se demostró en el Pentecostés.

    Cuando los yahudím y prosélitos que se habían reunido en Yerushalayim, y que ya tenían conocimiento de las Escrituras Hebreas, oyeron hablar a Kefa (Pedro) acerca de Yeshúa haMashiaj con el resultado de que 3.000 “abrazaron su palabra de buena gana” entonces, dice el relato, que“fueron inmersos”. (Hch 2:41; 3:19–4:4; 10:34-38.) Es preciso señalar que Kefa dirigió la atención de ellos a algo nuevo: no al arrepentimiento y al bautismo de Yojanan, sino a la necesidad de arrepentirse y sumergirse en el nombre de Yehoshúa haMashiaj para conseguir el perdón de pecados. No afirmó que la inmersión en sí misma limpiase los pecados, pues sabía que es “la sangre de Yehoshúa su Hijo [lo que] nos limpia de todo pecado”. (1Jn 1:7.) Más tarde, refiriéndose a Yahoshúa como el “Autor de la vida”, les dijo a los yahudím en el templo: “Hch 3:19 Por lo tanto, arrepiéntanse [teshuvah] y vuélvanse a YHVH, para que sus pecados sean borrados;

Hch 3:20 para que tiempos de refrigerio vengan de la presencia del Adón, y pueda enviar al Mashíaj designado de antemano para vosotros, a saber, Yehoshúa.”. (Hch 3:19,20)

¿De dónde toma Pablo la mitzvah de la inmersión?

    Es evidente que la toma en primer lugar de las propias palabras del Adom y Moréh Yehoh·schú·a‛ o Yeshúa escritas por Mateo:

Mat 28:19  Por lo tanto, vayan a hacer talmidim a gente de todas las naciones, dándoles la inmersión en mi Nombre.

Mat 28:20  ¡Y enséñenles a obedecer todo lo que les he ordenado! Yo estaré con ustedes, sí, hasta el fin de la época."

 La lectura original no tenía un tono "trinitario" añadido después. 

    Esto se debe a que el evangelio de Mateo escrito primeramente en hebreo y posteriormente al griego, se hicieron de el copias en hebreo.

Una de esas copias de usó más tarde para confeccionar el famoso y controversial Mateo de Shem Tov donde NO APARECE LA FÓRMULA TRINITARIA tan usada en casi todas las religiones de la Cristiandad para realizar las diferentes formas que tienen del Bautismo ceremonial.

    Durante la fiesta de YHVH en Jerusalém de las Semanas o Sevaot los primeros talmidím de Yehoshúa realizaron conversiones multitudinarias por inmersión de judíos y prosélitos y sabemos que aquella ceremonia sencilla de Conversión se dice claramente que se sumergía en el Nombre de Yehoshúa. Esta formula no trinitaria viene resumida en el libro de los Hechos de esta manera:

Hch 2:38 Entonces Shimón les dijo: “Arrepiéntanse y sumergios cada uno en el nombre de Yehoshúa el Mesías, para que se os perdonen vuestros pecados, y recibiriréis el don de la rúaj santa.

   :

Hch 2:38  Kefa les respondió: "¡Vuélvanse de sus pecados [teshuvah], regresen a YHVH, y sea cada uno de ustedes sumergido en la autoridad de Yehoshúa el Mesías para perdón de sus pecados; y recibirán el don de la rúaj santa!

Otros textos posteriores (no trinitarios) que demuestran también que se hacía en el nombre de Yehoshúa son:

Hch 8:16  Porque hasta ese momento no había descendido sobre ninguno de ellos; solamente habían sido sumergidos en El Nombre de Yehoshúa.

Hch 10:48 Y él ordenó que todos fueran sumergidos en El Nombre de Yehoshúa el Mesías. Después le pidieron a Kefa que se quedaran por unos días.

   Por consiguiente el enviado Shaul conocía bien la manera en que los primeros talmidím de Yehoshúa‛efectuaron la inmersión o Tevilah a partir de la fiesta de YHVH denominada Sevauot o Pentecostés en el nombre del mismísimo Yehoshúa el Mesías y no mediante una formula trinitaria como la que utilizan la mayor parte de las religiones llamadas cristianas de hoy día.

Aproximadamente unos 20 después de aquella conversión mesianística multitudinaria que efectuaron los apóstoles en el Pentecostés de Jerusalén, a Apolos, un discípulo que tenía mucho celo e impartía enseñanza correcta sobre Yeshúa, pero que solo conocía el bautismo de Yojanan se le tuvo que instruir en este aspecto de la inmersión en Yehoshúa. El relato dice:

En la fe hebrea la inmersión (heb: Teviláh) tenía diversos propósitos y se podía realizar en muy diversas ocasiones, y muchas veces, no solamente una vez y eran rituales de purificación. Sin embargo cuando el enviado Shaúl (Pablo) habla de "una fe, una inmersión..." (Efesios) está refiriéndose obviamente a la inmersión que se hace por Conversión, cuando una persona entra a unirse a la fe mesianística de Israel.

La Inmersión o Bautismo Nazareno del Israel Redimido de YHVH es como indica Hechos 8:12 NPIN: (8:12) 

Mas  cuando  creyeron  a Filippo,  que  anunciaba  el Buen Mensaje  del   reino   de Elohím  y  el nombre de  Yehoshúa el Mesías, eran sumergidos tanto varones como mujeres. 

Debemos decir que también se bautizaban por inmersión mujeres y varones con distintas incapacidades o en circunstancias especiales como las embarazadas. En este último caso sería conveniente que dos varones estuvieran con ella.

Hch 18:23 pasó un tiempo allí y, después de esto, pasó sistemáticamente por la región de Galacia y Frigia, fortaleciendo a todos los talmidim.

Hch 18:24 Mientras tanto, un hombre Judío llamado Apolos, nativo de Alejandría, vino a Efeso. Era un orador elocuente, con pleno conocimiento de las Escrituras.

Hch 18:25 Este hombre había sido informado acerca del "Camino de YHVH" y con gran ardor en la rúaj habló y enseñó con exactitud las verdades acerca de Yehoshúa, pero sólo sabía sobre la inmersión de Yojanán.

Hch 18:26 Empezó a hablar con audacia en la sinagoga; pero cuando Priscila y Aquila le oyeron, le llevaron aparte y le explicaron las sendas de YHVH en detalle.

En Hechos 19:1-7 dice así el relato dice::

Hch 19:1 Mientras Apolos estaba en Corinto, Shaúl completaba sus viajes por las regiones del interior y luego vino a Efeso, donde se encontró con algunos talmidim.

2 Y les preguntó: "¿Recibieron ustedes la rúaj santa cuando llegaron a confiar?" "No," le dijeron ellos, "nosotros ni sabíamos que había tal cosa como la rúaj santa"

3 "En ese caso," él dijo: "¿en quién fueron inmersos?" Ellos respondieron: "En la inmersión de Yojanán."

4 Shaúl dijo: "Yojanán practicó una inmersión relacionada con volverse de los pecados a YHVH, pero le dijo al pueblo que pusieran su confianza en el que vendría después de él, éste es Yehoshúa."

5 Al oír esto, fueron sumergidos dentro del nombre de Yehohshúa;

6 y cuando Shaúl les impuso las manos, la rúaj de santidad vino sobre ellos; así, empezaron a hablar en lenguas y a profetizar.

7 Eran en total unos 12 hombres.

Pero en la actualidad el término “Bautismo” se le ha adjudicado el significado de "Ceremonia de iniciación a la Comunidad." Por eso en los medios mesianísticos más conservadores incluido el de las Comunidades Nazarenas (y en el judaísmo tradicional)  se usa la palabra "Bautismo por Inmersión en agua", porque ésta ha cambiado de significado a través de los siglos.

En esta sección veremos ejemplos fotográficos de diferentes bautismos efectuados por diversas iglesias y grupos.

El bautismo debe ir de la mano de la convicción, la creencia y el arrepentimiento y debe  ser  realizado,  lo  antes  posible  después  de  que  uno  haya  decidido  estar  en Cristo.

En algunas iglesias, insisten en períodos a menudo largos de estudio de la Biblia para obtener suficiente conocimiento doctrinal para calificar para el bautismo.

Esto es bastante antibíblico como vimos arriba los muchos ejemplos de la forma en que los Apóstoles bautizaban. El componente importante es el arrepentimiento y el deseo  de  estar  en  Cristo. 

Un  ejemplo  a propósito de lo que decimos,  es  el  de  un hombre al que su iglesia le dijo  que la venida de Jesús estaba cerca e incluso era inminente, y que él necesitaba estar listo antes de que viniera el Armagedón; y sin embargo, por otro lado insistió en que pasar 6 meses o más haciendo un curso de estudio de la Biblia antes de que pudiera ¡ser bautizado y ser salvo!. Otro caso habla de un joven que fue examinado sólo una vez al año y tardó 4 años en bautizarse, a pesar de conocer todas las doctrinas básicas pero que el examinador le puso una zancadilla con una pregunta técnica.

A  menudo,  en  estos  largos  exámenes  de  los  conversos,  no  se  hace  ninguna referencia o énfasis en el arrepentimiento - ¡que es de lo que el bautismo realmente trata!

COMO RECIBIR EL BAUTISMO CON EL ESPÍRITU SANTO

Recordemos los siguientes hechos en la palabra de YHVH:

1. (Hechos 2:11-14): El Espíritu santo ya ha sido dado en Pentecostés y está en el mundo desde entonces. Solo nos resta recibir el Bautismo en el Espíritu Santo (si somos verdaderos creyentes ya vive en nosotros

Romanos 8: 9,16; Gálatas 4:6) y por la fe apropiarnos de la promesa.

YHVH es el más interesado en que cada uno de nosotros reciba el poder

del Espíritu, es más, lo manda (Efesios 5:18).

2. (Hechos 2:38-39): Toda persona que ya es salva por su fe en Cristo o Mesías es apta para recibir el Bautismo con el Espíritu Santo. La promesa del Padre es

para todo creyente.

3. (Hechos 5:32) Es necesaria una disposición de renuncia al pecado y de obediencia a YHVH y el bautismo en agua viva.

No significa que uno haya alcanzado ya un alto nivel de espiritualidad

o que ya sea un santo, sino que tenga el deseo y la disposición. Es decirle al Señor:

“Padre celestial, soy Tu propiedad. Me has comprado con la sangre del Mesías Yehoshúa. Reconozco que eres Mi dueño absoluto. Haz lo que quieras de mí, aquí estoy en ofrenda viva para Tí”.

Esto es decisivo para recibir el Bautismo en el Espíritu. Algún aspecto de la vida sin rendir es lo que impide a muchos esta bendición. El Señor ve nuestro corazón, y si encuentra sinceridad en él, nos bautizará con Su rúaj. El poder del Espíritu santo, entonces, será un poder adicional para vivir en victoria sobre el mundo.

4. (Juan 7:37-39) Notemos la condición:“Si alguno tiene sed”. Tener sed es desear intensamente. Es no estar conforme con la situación actual.

Es desear el Bautismo con el Espíritu Santo como una necesidad absoluta.

Si se siente ese deseo y necesidad, aunque no comprenda todas las cosas, la bendición está muy cerca.

5. (Lucas 11:13): Yehoshúa es muy claro: si pedimos, recibiremos. Si pedimos que nos bautice en Su Rúaj Santa, El lo hará.

6. (Marcos 11:24): Recibir por fe “os digo que todo lo que pidiereis orando, creed que ya lo habéis recibido, y os vendrá”. No importa cuán absolutas sean las promesas de Elohím, solo las recibimos si creemos. También dice la Biblia:” si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad,

El nos oye,(y es la voluntad de Elohím bautizarnos con la Rúaj Santa). Y si sabemos que él nos oye en cualquiera cosa que le pidamos, sabemos que tenemos las peticiones que hayamos hecho” (1 Juan 5:14-15).

Recibe el bautismo en la rúaj de santidad AHORA.

Leer Hechos 19:1-6

Se debe creer que es para hoy, para todos los creyentes y que YHVH quiere darlo:
“La promesa es para vosotros…para todos los que El Llamare”.Hechos 1:4; 2:39.
Efesios 5:18 dice…”sed llenos del Espíritu”. No solo quiere darlo sino que es una orden. Nos ordena recibirlo (no es opcional).
…dará el Espíritu Santo a los que se lo pidan”. Lucas 11:13
Pablo: a el le impusieron las manos Hechos 9:17 y el impuso las manos a otros Hechos 19:6
Pedro y Cornelio: (no hubo imposición de manos) pero hablaban en lenguas y magnificaban a Dios” Hechos 10:44-46.

¿Qué hacer?

Arrepentirse y bautizarse: Hacer oración de arrepentimiento y renuncia y hacer la tevilah o bautismo.
Rendirse: (Ejemplo: darle todas las llaves de todos los cuartos de la casa)
Pedir: pedid y se os dará…Lucas 11:9…si pedimos alguna cosa de acuerdo a su voluntad, él nos oye. Y si sabemos que él nos oye en cualquiera cosa que pidamos, sabemos que tenemos las peticiones que le hayamos hecho.
1 Juan 5:14-15.
Creer y recibir la Rúaj desde lo alto

    Así les mostró que lo que supondría perdón de pecados era el arrepentirse de su mal proceder en contra de Mashiaj y ‘volverse’, aceptándolo como Salvador.

    Otros que también fueron inmersos en Tevilah son los samaritanos pero se les hizo tevilah después de creer las buenas nuevas predicadas por Felipos. Así dice el texto de Hch 8:12.:

Hch 8:12 Pero cuando llegaban a creer a Felipe, mientras anunciaba las Buenas Noticias referentes al Reino de YHWH y al Nombre de Yehoshúa el Mesías, eran sumergidos ambos hombres y mujeres.

    Tenemos además el relato narrado por Lucas sobre el eunuco etíope, y no necesariamente “un castratti”, ya que la palabra Aramea mahimna es la utilizada y tiene dos traducciones, una es eunuco y otra es lleno de fe, puesto que este hombre fue a Yerushaláyim en Shavuot a adorar de acuerdo con la Toráh, no podría entrar en el Templo siendo eunuco, según Devarím 23:1. Este era prosélito judío y ministro de Hacienda del reino etíope de la reina Candace, como tal, tenía conocimiento de YHVH y de las Escrituras Hebreas, y por lo menos llevaba consigo el rollo de Isaías del cual leía en su carruaje. Antes de nada, oyó la explicación del cumplimiento de esas Escrituras en el Mashiaj, la aceptó convencidamente y después quiso ser sumergido como dice el relato:

Hch 8:34 DA  El hombre lleno de fe le dijo a Felipos: "He aquí mi pregunta para ti: El profeta, ¿está hablando de sí mismo o de otro?"

Hch 8:35 Entonces Felipos comenzó a hablar; comenzando por ese pasaje, siguió para proclamarle las Buenas Noticias acerca de Yehoshúa.

Hch 8:36 Mientras iban por el camino, llegaron a un poco de agua, y el hombre lleno de fe le dijo: "¡Mira, aquí hay agua! ¿Hay alguna razón por la cual no pueda ser sumergido?

Alrededor del año 34-36 E.C., Elohím le dio instrucciones a Kefa o Simón Pedro para que fuese al hogar del gentil Cornelio, un oficial del rango ecuestre del ejército romano, y, al derramar su espíritu de santidad sobre él y todos los de su casa, le mostró a Kefa que a partir de entonces se podía aceptar a los gentiles para bautismo en agua. (Hch 10:34, 35, 44-48.) Para ello YHVH se valió de una visión y cuando le bajó la sábana receptáculo llena de animales a Kefa no le estaba hablando de comidas, estaba hablándole que no llamar inmundos a hombres gentiles. En el contexto Hebreo los hombres eran los que la sociedad judía solo consideraba como Israelitas; sin embargo, las bestias, los reptiles que se arrastran y las aves carroñeras que vuelan eran los paganos. YHVH lo que le mostraba a Kefa ahora es que no llamara inmundos a hombres y mujeres que amaban a Yisra'el y que estaban regresando a YHVH y a la Toráh. La visión era totalmente sobre la gente de Yisra'el y no sobre comidas. Pero como el cristianismo saca todos los versos fuera de contexto para justificar su desobediencia a la Toráh, se lleva por un solo verso, el que más les guste, en este caso por el verso 13: "Levántate Kefa, mata y come." Y ya no investiga más nada, ahí para de leer el pasaje porque ya consiguió su propósito la falsa auto-justificación (gran pecado).

Esta visión fue para mostrar a Kefa y los Yahudím que YHWH está limpiando hombres y mujeres Israelitas de los cuatro confines del mundo de su inmundicia por haber vivido entre las naciones y haberse gentilizado entre ellos y también por extensión a los que desean ser ramas injertadas en el tronco del olivo de Yisrael aunque no sean de origen judío. 

    Puesto que Elohím aceptaba en su nuevo pacto (Jeremías 31: 31-33) mediado por Yehoshúa no solo a los judíos naturales arrepentidos que eran tronco y núcleo de Yisrael, (Romanos 11) aunque fueran circuncisos, y estuvieran en relación especial con Él, sino también a los que de igual modo se injertaban en dicho tronco de Yisrael para alcanzar ser estado de Israel, ser nación espiritual con una buena posición ante Abbá observando las leyes divinas de la Torah, no ya como medida legalista sobre la base de sacrificios de animales, sino como escrita en los corazones de carne con fe en que la salvación no era solo por obras de Torah sino por fe en el sacrificio de Yehoshúa una vez para siempre. A partir de ese momento, estaban obligados a acercarse al Padre poniendo fe en su Hijo y siendo sumergidos en agua en el nombre de Yehoshúa haMashiaj, a fin de tener el reconocimiento y favor de YHVH. Por consiguiente, Kefa explicó a Cornelio que “el que le teme y hace tzedakah (o justicia),  ese es aceptable ante él, no importa a qué pueblo pertenezca.” (Hch 10:35 DA), y que todo el que pone fe en Yehoshúa consigue perdón de pecados por medio de su nombre. (Hch 10:43; 11:18.) Todo esto está en armonía con el mandato “Mat 28:19 Por lo tanto, vayan a hacer talmidim a gente de todas las naciones,  dándoles la inmersión en Mi Nombre. Mat 28:20 ¡Y enséñenles a obedecer todo lo que les he ordenado! Yo estaré con ustedes, sí, hasta el fin de la época." 

   Es apropiado que se bautice a aquellos que aceptan la enseñanza y llegan a ser Talmidím. (Mt 28:19, 20; Hch 1:8.)

Por lo tanto, después de la inmersión de la Casa de Cornelio el Centurión en el año 34 o el 36 E.C., todos, tanto judíos como gentiles, han disfrutado de la misma posición a los ojos de YHVH. (Ro 11:30-32; 14:12.) Las personas de las naciones gentiles no estaban en el pacto de la Ley y nunca habían sido parte de un pueblo que tuviera una relación especial con  el Padre, excepto aquellos a los que se había circuncidado como prosélitos judíos. A partir de ese momento, se les extendía la oportunidad a nivel individual de llegar a ser parte del pueblo de Israel. No obstante, antes de que se les pudiese bautizar en agua, tenían que acercarse a Elohím, ejerciendo fe en su Hijo Yeshúa como el Mesías salvador. Luego debía seguir la inmersión en agua, según el ejemplo y mandato del Mesías de Netzaret. (Mt 3:13-15; 28:18-20.)

BAUTISMO EN CASA

Esta inmersión o tevilah mesianista tiene un efecto vital en la posición de la persona ante Elohím. Después de decir que Nóaj construyó un arca en la que se conservó con vida a través del Diluvio tanto a él como a su familia, el apóstol Kefa escribió: “1Pe 3:21 Aquella agua era un símbolo de la inmersión que ahora los salva a ustedes también, no en cuanto a quitarles la impureza carnal, sino en cuanto a la respuesta de una conciencia limpia para con YHVH, mediante la resurrección de Yehoshúa el Mashíaj.”. (1Pe 3:20, 21.)

El arca era prueba tangible de la Obediencia de Noaj a los mandamientos que se le dio a fin de hacer la voluntad de YHWHy terminar fielmente la obra que Él le había asignado según los planos divinos. Eso hizo posible que conservara la vida. De modo correspondiente, se salvará del presente mundo malvado a los que se dedican a YAH sobre la base de la fe en el resucitado Yehoshúa, se bautizan en símbolo de esa dedicación previa y obedecen Torah de la voluntad del Padre mediante Mesías (Gál 1:3, 4.) Ya no se encaminan a la destrucción con el resto del mundo malvado. Elohím el Padre nos concede una conciencia limpia con la esperanza de salvación. Es evidente que la inmersión en agua no quita ningún pecado pero si es una muestra publica de nuestro arrepentimiento y nuestra Conversión en Mashiaj con la esperanza puesta en su Reino milenario en la Tierra.

EL BAUTISMO DESNUDO DE INMERSIÓN

SOBRE LA FORMA DE BAUTIZAR EN EL RITUAL DE LOS SIGLOS I AL VI EC.

Los catecúmenos, en la Iglesia primitiva y hasta el siglo XV, recibían el Sacramento del Bautismo  completamente desnudos Y POR INMERSIÓN.

Tenemos noticias del modo en que se desarrollaba el rito bautismal especialmente por los escritos de Hipólito de Roma (siglos I-II), Cirilo de Jerusalén (siglo IV),  Juan Crisóstomo (siglo IV) y Teodoro de Mopsuestia (siglos IV-V). El despojamiento de la ropa representaba simbólicamente la renuncia a lo que Pablo llamó "la persona vieja" para renacer a la Vida en la Fe Mesiánica. El Sacramento se recibía bien en una corriente de agua, bien en una pila, cuya forma evocaba la del útero materno, del cual, como en un nuevo parto, llegaba al mundo una criatura renovada, desnuda por 2ª vez, igualándose así con Adán antes de la Caída y con Yeshúa crucificado.

Hoy en día este bautismo sin ropa se realiza normalmente dentro de piscinas o bañeras de forma privada. 

Y Cirilo escribe en la XX de sus Catequesis  (Mistagógica II):

            "Inmediatamente después de que entrasteis, os despojasteis de la túnica: ésta era imagen del hombre viejo, del que os habéis despojado con sus obras (cf. Col 2, 12 ss.; 3, 1 ss.; 9 ss.; cf. Ef 2,1-10). Al despojaros, os quedasteis desnudos, imitando también en esto a Cristo desnudo en la cruz, el cual con esta desnudez, 'una vez despojados los Principados y las Potestades, los exhibió públicamente, incorporándolos a su cortejo triunfal' (Col 2, 15). Y puesto que habitaban en vuestros miembros las potestades adversas, ya no os es lícito seguir llevando aquella vieja túnica: y no me refiero a la que se percibe con los sentidos, sino al 'hombre viejo que se corrompe siguiendo la seducción de las concupiscencias' (Ef 4, 22). Y que nunca suceda que el alma se revista de nuevo de la vestimenta de que una vez se despojó, sino que diga como aquella esposa de Cristo de la que se habla en el Cantar de los Cantares: '—Me he quitado mi túnica, ¿cómo ponérmela de nuevo?' (Cant 5, 3). ¡Oh realidad admirable! Desnudos estuvisteis ante los ojos de todos, pero no sentíais vergüenza. Llevabais realmente la imagen del primer padre Adán, que estaba desnudo en el paraíso y no se avergonzaba.

Basados en el Evangelio: Edificar a los creyentes a la antigua , pág. 57.

la Iglesia Ortodoxa Rusa en la Epifanía todavía bautiza desnuda (en su mayoría niños y niñas) y durante la Epifanía Ortodoxa  cada año (como aniversario) el 19 de enero renuevan sus votos bautismales totalmente desnudos, tanto varones  como mujeres, muchas veces  bajo las gélidas aguas eslavas. ese día, 19 de enero, en remembranza del bautismo del Mesías por parte de Juan el Bautista, el cual de acuerdo con el calendario ortodoxo ocurrió en ese día. Siendo una de las celebraciones más antiguas del calendario cristiano, es un gran evento en Rusia, un país predominantemente ortodoxo.

Historia de la celebración

Entender el significado espiritual de la epifanía ayuda a esclarecer los rituales que se observan durante esta celebración. Yojanán el Bautista era conocido por predicar sermones acerca de la necesidad del arrepentimiento y por bautizar a mucha de la gente que lo escuchó predicar. A la edad de 30, Yeshúa mismo le pidió a Yojanán que lo bautizase en el Yardén o Jordán. Tras la ceremonia, la voz de Elohím se escuchó desde los cielos declarando a Yeshúa como su Hijo, tras lo cual se abrieron los cielos y el Espíritu Santo descendió en forma como paloma. Este evento hizo claro para todos los presentes que Yeshúa era de origen divino.

la tradición más inusual de la Epifanía Bautismal en Rusia es rememorar cada año el ritual de bautismo pero en aguas heladas. Para prepararse para este evento, en los ríos, lagos y reservas artificiales naturales congeladas, se cortan en el hielo grandes huecos, algunas veces en forma de cruz. Alternativamente, fuentes especiales o cabinas para remojarse son instaladas en los centros de las ciudades y plazas de los pueblos. Se espera que los participantes se sumerjan 3 veces consecutivas en el agua, la cual es a menudo referida como el “Jordán”.

Aunque bañarse en las aguas heladas es voluntario, muchos creyentes eligen tomar parte de este ritual totalmente desnudos, y se cree fuertemente que tiene el poder de revitalizar a la persona entera a través de la purificación tanto de su cuerpo, como de su ser.

Tanto el Texto bíblico de Hechos 8:12 como la exposición de Hipólito en su Historia de la Tradición apostólica de la Iglesia  nos presenta una pregunta disyuntiva:

¿Deberían los niños y las niñas bautizarse o sumergirse en la aguas vivas de una Mitvé, el río, mar o en una bañera o piscina, en símbolo de su dedicación y entrega, si reconocen y entienden perfectamente por si mismos lo que implica el ritual?

Sobre esta pregunta es interesante el estudio de como otras confesiones religiosas opinan sobre esto y llegar a conclusiones acertadas según las Escrituras. A continuación exponemos extractos de interés de un artículo de la Iglesia de Jesucristo de los santos de los últimos días, que hace reflexionar.

BAUTISMO EN LA IGLESIA DE JESUCRISTO DE LOS SANTOS DE LOS ÚLTIMOS DÍAS,
¿Por qué a la edad de 8 años?

por C. N. Ottosen
Liahona Enero 1971

Cristo le dijo claramente a Nicodemo, “el que no naciere de agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios”, y para mayor claridad añadió: “No te maravilles de que te dije: Os es ne­cesario nacer de nuevo” (Juan 3:5, 7). A fin de ser admitidos como miembros de la Iglesia de Jesucristo, son necesarios el bautismo y el arrepentimiento, los cuales son la senda por la cual todos deben de pasar para obtener la remisión de los pecados, ser dignos de recibir el Espíritu Santo y llegar a ser miembros del reino de Dios. (Véase Hechos 2:38; 2 Nefi 31:17.)

Este mandato es para todos los hombres porque así le declaró Cristo a Juan al tiempo de su bautismo, “Deja ahora, porque así conviene que cumplamos toda justicia” (Mateo 3:15). La excepción sobresaliente es con los niños. Cristo dijo: “Dejad a los niños venir a mí, y no se lo impidáis; porque de los tales es el reino de los cielos” (Mateo 19:14). Entonces el Salvador puso sus manos sobre ellos y los bendijo.

 El llamado profeta Mormón declaró que “Los niños pequeñitos no pueden arrepentirse;… Y el que dice que los niños pequeñitos tienen necesidad de bautizarse, niega las misericordias de Cristo y desprecia su expiación y el poder de su redención” (Moroni 8:19- 20).

Es natural que la declaración de Mormón, así como las referencias similares de las escrituras, deberán aplicarse sólo hasta que el niño se haya desarrollado y madurado hasta el grado que sea capaz de arrepentirse, de distinguir entre el bien del mal y de comenzar a ser responsable de sus propios hechos. Una vez que haya llegado a este punto en su desarrollo, debe “nacer de agua y del Espíritu” a fin de entrar al reino de Dios y ser miembro de la Iglesia de Cristo.

El hecho de que Cristo haya declarado el bautismo como un mandamiento para todos los hombres, no significa que esté en discordancia bíblica con la declaración de Mormón, de que los niños pequeños no tienen necesidad del bautismo. Es natural que el arrepentimiento sea imposible en los tiernos años de la infancia, sin embargo más tarde, conforme se desarrollan, llegan a un estado donde el arrepen­timiento es posible. Todo lo contrario sería incom­patible con el programa de un Padre Celestial bon­dadoso y sabio. Es lógico esperar que llegará el tiem­po cuando en el desarrollo de la personalidad, el niño será llamado a responder por sus hechos, a arre­pentirse del error y a cumplir “con toda rectitud” así como todos los hombres. Las iglesias que prac­tican el bautismo de los niños pequeños y tratan de defender su posición, encuentran que no pueden apoyar bíblicamente—ni de ninguna otra manera— esta práctica. Son variables los puntos de vista del clero...

La revelación moderna viene al rescate, aclara el asunto y verifica el hecho de que a los niños menores, que todavía no se encuentran en la edad de responsabilidad, no se les debe negar la entrada al reino de Dios y están disculpados de no llevar a cabo la ordenanza del bautismo hasta que hayan llegado a la edad de discernimiento y responsabilidad. Por medio del profeta José Smith el Señor instruyó a la Iglesia, “ninguno puede ser admitido en la iglesia de Cristo a no ser que haya llegado a la edad de responsabilidad ante Dios, y sea capaz de arrepentirse” (Doc. y Con. 20:17), y, más específicamente, que “sus hijos serán bautizados para la remisión de sus pecados cuando tengan 8 años de edad, y recibirán la imposición de manos” (Doc. y Con, 68:27). Y es la responsabilidad de los padres ver que los hijos comprendan el significado del arrepentimiento, que se les enseñe la fe en Cristo, el Hijo de Dios, y se les prepare para la ordenanza del bautismo a esa edad, porque de no ser así, “el pecado recaerá sobre las cabezas de los padres”. (Doctrinas y Convenios 68:25).

 ¿Hasta qué grado se puede o no designar arbitrariamente la edad de 8 años como la edad cuando el niño puede ser responsable de sus hechos; una edad cuando de ellos se espera el discernimiento y el juicio, a fin de que se requiera de ellos el arrepentimiento y el bautismo? De hecho, ¿existe una base, experiencia o lógica que garanticen la edad designada de 8 años como la edad de responsabilidad? ¿Son capaces los niños a esa edad, de distinguir la diferencia entre el bien y el mal? ¿Son capaces de una nueva vida, oportunidad y obligaciones que son posibles después del bautismo, y de recibir el Espíritu Santo?

Es interesante notar que en ciertos campos de estudio y actividad, los niños de 8 años de edad, son considerados, casi por unanimidad, como en la edad de responsabilidad, comenzando el período en su desarrollo cuando son capaces de ejercer discerni­miento, juicio y autodisciplina; y pueden compren­der el peligro y conocer la diferencia entre el bien y el mal. De acuerdo a los estudios de investigación que se llevaron a cabo en el campo de la psicología infantil, las características de madurez de los niños de 8 años de edad responden afirmativamente a esas preguntas y apoyan las conclusiones antes men­cionadas.

¿Cómo es el niño a la edad de 8 años? Los doctores Arnold Gesell y Francés L. Ilg, de la Clínica del Desarrollo del Niño, en la Facultad de Medicina de la Universidad de Yale, colaboraron en estudios e investigaciones durante un período de varios años, analizaron el desarrollo, crecimiento y proceso men­tal del niño, y llegaron a las siguientes conclusiones:

A la edad de 8 años el niño se aproxima más a las normas de los adultos. A esta edad existe la tendencia de valorar y estimar lo que le pasa y cuáles son las razones por las que suceden las cosas.

A los 8 años es más capaz de controlar sus pensamientos, de hacer decisiones y de pensar detenidamente las cosas. Quiere ser bueno y está consciente de las dos fuerzas opuestas del bien y el mal. Es más responsable de sus hechos y se atiene a las consecuencias. Es honesto y tiene un interés activo en la religión y la Biblia. Muestra mayor iniciativa para salir y enfrentarse con su medio ambiente. (Arnold Gesell y Francés L. Ilg, The Child From Five to Ten [El niño de los cinco a los diez años] pág. 160-86.)

A William Johnz, Director de la Escuela de Edu­cación Elemental para Incapacitados en Berkeley, California, frecuentemente se le ha atribuido la si­guiente declaración: “La mejor edad en la vida de la persona para explorar la ciencia abstracta y las matemáticas es entre los 8 y los 11 años de edad.” (Salt Lake Tribune, 15 de diciembre de 1966, p. A-17.)

Todos los tribunales reconocen que durante los años de la infancia, incluyendo los cinco y seis años de edad, los niños no tienen suficiente discernimiento como para ser juzgados por negligencia o negligencia contribuyente, y por lo tanto son consi­derados incapaces de ese acto. Un tribunal lo expresó como sigue:

“Seguimos la ley enunciada por las numerosas autoridades dignas de respeto, que un infante menor de siete años es incapaz de contribuir a la negligencia” (Baker vs. Alt, p. 620, Tyler vs. Weed, p. 383).

Evidentemente, a través de los siglos, los estu­diantes, psicólogos y jueces en conducta criminal y agravios indemnizables han establecido que a la edad de 8 años el desarrollo normal de un niño ha llegado a tal grado que éste puede ser considerado lo suficientemente maduro como para ser responsa­ble de sus hechos.

El material precedente es pre­sentado sólo para apoyar lo que los Santos de los Últimos Días estiman como la mejor evidencia en el mundo respecto al tiempo en que se debe bautizar a los niños… la indicación personal de Dios a José Smith de que los niños y niñas  debían ser bautizados a los 8 años de edad. Todas las demás pruebas son secundarias.

La mayor alabanza que se puede hacer de un hombre es compararte a un niño.

extraído de artículo de: Constancio C. Vigil

¿Qué hay de la edad en la Iglesia o Kehilah Nazarena del Amor?

No abogamos por un bautismo a una edad infantil pues entendemos que el N.T. es una revelación acerca de decisiones voluntarias personales relacionadas al sentido consciente de culpa. Uno debe reconocer su necesidad de un Salvador, reconocer que debe ser Redimido o Redimida. Esto nos lleva a la siguiente pregunta: “¿nacen las personas siendo ya pecadoras en Adán, o son pecadoras cuando deciden desobedecer voluntariamente al Elohím?” En el judaísmo da lugar a un periodo de inocencia en la niñez hasta que se llega a un conocimiento de la Ley y el compromiso a guardarla; para los varones es a los 13 años, para las mujeres, a los 12. Los rabinos no enfatizan Génesis 3 tanto como lo hace las iglesias cristianas.

El N.T. es un libro dirigido a los adultos. Afirma el amor de YHWH por los niños, ¡pero su mensaje está dirigido directamente a los adultos! Sin embargo, debemos admitir que vivimos es una sociedad democrática enfocada en el individuo, mientras que la cultura bíblica está enfocada en la familia, el clan y la tribu.

Pero si admitimos que antes de los 13 y 12 años de edad hay jovencitos y jovencitas que desean simbolizar su dedicación o consagración antes y no hay objeción alguna a que efectúen su bautismo nazareno en su familia.